Monday, December 28, 2009

Último día...

Ya no escribiré más. No es para preocuparse. Pero ni siquiera este último mensaje es realmente mío, es sólo mi plegaria para el año que viene pero la escribió otra persona más de veinte años...



"Good times for a change
See, the luck I've had
Can make a good man
Turn bad

So please please please
Let me, let me, let me
Let me get what I want
This time

Havent had a dream in a long time
See, the life I've had
Can make a good man bad

So for once in my life
Let me get what I want
Lord knows, it would be the first time
Lord knows, it would be the first time"

Saturday, July 11, 2009

dia 14

El año avanza y yo sigo estancado. Las cosas han cambiado un poco, pero no para bien. Solo han cambiado. La historia es la misma pero las caras cambian un poco. Sólo un poco...

Todo es "poco", "un poco", "a pocos", y yo sigo con la cabeza a mil revoluciones por recuerdo...

Diría que estoy harto de este estado de ánimo tan gris, pero el hartazgo no significa nada si no deriva en algo que afecte esta situación, aunque sea una explosión de ira y frustración. Pero ni siquiera me he acercado a eso.

Musa, ¿dónde andas? ¿Quién eres? ¿Es verdad que me buscaste el otro día y yo no me di cuenta de tu presencia?

Thursday, May 21, 2009

Día 12

El silencio pudo ser motivo de preocupación (¿de quién?) pero vengo por un momento a decir que debe ser motivo de tranquilidad (para mí). En silencio se sanan las heridas, el equilibrio lo recupero poco a poco, soy un equilibrista en cámara lenta, casi tropecé sobre un precipicio de fondo brumoso, lejano, espantoso...

Mi musa reticente es muchas, en realidad

Te mando un beso imposible...

"Close your eyes and think of someone you physically admire
And let me kiss you, let me kiss you

But then you open your eyes and you see someone that you physically despise
But my heart is open, my heart is open to you."

Saturday, March 7, 2009

Día 10

Árboles frondosos bajo la lluvia

No puedo escribir con regularidad sin descender a la lástima por mí mismo, cosa que no puedo aceptar como digna de ser publicada. Estoy lleno de ansiedad, de intranquilidad, de deseos. Y todos esos impulsos emergen con energía y brillo pero no tienen dónde ir, se acumulan, se atracan y se pudren, y esa podredumbre maloliente me hace pensar de manera recurrente en acabar con todo pero no encuentro ni encontraré el valor.

Sólo se me ocurre escribir notas de suicidio que nunca nadie leerá.

Y empiezo hoy con una que no es mía y que está en inglés... la traduzco burdamente y la rescato para la musa reticente, que quizás no sea solo una sino varias en una. No lo sabre con certeza aún.


When I am dead, and over me bright April
Shakes out her rain drenched hair,
Tho you should lean above me broken hearted,
I shall not care.
For I shall have peace.
As leafey trees are peaceful
When rain bends down the bough.
And I shall be more silent and cold hearted
Than you are now.


"Cuando esté muerta, y abril brillosa sobre mí
sacuda su cabello empapado de lluvia
Aunque tú te inclines por encima mío con el corazón partido
No me importará
Porque tendré paz
Así como los árboles frondosos están llenos de paz
Cuando la lluvia tuerce la gran rama hacia abajo
Y seré más silenciosa y de frío corazón
De lo que tú eres ahora"

Supuesta nota de suicidio para el amante que la dejó.
~~ Sara Teasdale, poetisa, 1933

Saturday, February 14, 2009

Día 9

Mientras tanto...

No quiero volver a escribir con regularidad hasta cuando haya recuperado la tranquilidad y el control sobre mis recorridos oníricos, pero no quiero perder la costumbre de escribir tampoco...

Y los muros de este infierno serán, así, cada día más herméticos.

Saturday, January 31, 2009

Día 8

La retirada de enero

Vuelvo tras un mes de silencio. Todo este mes he tratado de volver a la normalidad, aunque mi vida distaría mucho de ser normal para la mayoría de personas que me rodean.

He evitado todo contacto con la musa reticente, ahora mis caminatas son a otras horas, calculo que es casi imposible toparme con ella y eso es bueno. Ella debe existir solamente en otro plano, en el tercio más grato de la vida. He evitado el Internet y he leído más, incluso varios libros de autores que antes nunca había conocido. He escrito más, aunque sin buenos resultados. He compuesto canciones y ya no son tan oscuras. He pensado comprar un piano, pero no sé si seré capaz de ahorrar tanto dinero.

He soñado mucho pero, aunque en los sueños soy el piloto, no puedo evitar navegar siempre con la musa reticente a la vista. Y me aterra que a veces su rostro se transforma en el de ella. Sí, ella. La que me llevó al terrible crimen hace muchos años.

Lima en el verano es a veces encantadora y lo debo admitir. La he aprendido a querer en estos diez años pero nunca me sentiré realmente limeño. Ni perderé jamás el acento extranjero.

En este mes he hablado muy poco con otra gente, mucho menos aún que de costumbre. Sólo escucho mi voz al ensayar melodías y letras para mis canciones. La oscuridad es menor, pero la angustia sigue ahí, la angustia por verla que alguna vez confundí con amor.

No debo escribir más, ya que no hay un tema particular hoy ni ando inspirado. Es solo un aviso para el lector imaginario: Sigo por aquí.

Tuesday, December 30, 2008

Día 7

Tres tercios desiguales, y en uno soy el piloto

Nuestra vida puede dividirse de muchas maneras. Algunos dirán que primero viene la niñez, luego la adolescencia, etc., otros quizás vean ciclos recurrentes. Yo pienso que se divide en tres y que cada día vivimos un poco de cada una de esas etapas. Más o menos un tercio de la vida la pasamos trabajando o estudiando, o haciendo cosas relacionadas con las obligaciones con la sociedad, o algo asi. Otro tercio lo pasamos en nuestras cosas privadas, haciendo los deberes de la casa, divirtiéndonos con amigos, viendo TV, leyendo libros, caminando por el malecón...

Yo en los últimos años me he concentrado mucho más en el otro tercio: el sueño. Las horas en las que duermo son las que más valoro. He aprendido a apreciarlas y a entender lo equivocado que está el mundo moderno en querer mostrarnos que lo importante en la vida son las otras dos, y sobre todo la del trabajo. En la noche cierro los ojos y soy libre. He aprendido a navegar a través de los sueños, a dejar que me lleven por momentos aunque a veces me asusten, pero al fin y al cabo soy el piloto, hasta ahora he logrado mantenerme firme en el timón.

Unos viven para trabajar, otros trabajan para vivir. Yo ya no trabajo porque recibo una modesta pensión. Esa modesta pensión me permite vivir austeramente. Y con eso vivo para soñar.

Por eso es que ya no debo buscar a la musa reticente, me está alejando del perfecto equilibrio y hacia lo mundano, donde no puedo ser el piloto.